El amor nos sueña, se quiere manifestar
quiere contagiarnos de su anti-destino,
de su tiempo desordenado, de sus múltiples caminos.
Anhela gritarse con un eco superlativo
que rompe barreras de futuro, presente y pasado,
barreras de verguenza efusiva, que nos planta a la monotonía.
Nos sueña todas las noches, somos la luz de su oscuridad,
quiere danzar con el alma, volar con el corazón y jugar con la mente.
Desea que veamos con los ojos cerrados, que sintamos la fineza de su adrenalina,
que escuchemos el silencio como la melodía mas elaborada y veamos a más de uno en el espejo.
Sé que no soy el único que ha conversado con él.
martes, 30 de marzo de 2010
sábado, 27 de marzo de 2010
arbol de verano
Árbol con espinas dobladas
Que regalas frutos de sangre de amor
Que como y transita por mis venas
Me va dejando atónito como una grandeza precolombina
mirando fijo una estrella sin luz
voy amigando a ese frío de verano
que me hace volar como hoja girando el aire
Oh luz de verano dime cual es tu paz y melodía
Para acurrucarme contigo y ver la luna de tu noche
Te apura el invierno y tu árbol deja ir a sus hijas
Las espinas se afilan y el fruto se pone agridulce
tiene que partir, y con el mi escondite más melodioso.
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